Champú con ginseng blanco

El ginseng blanco es una planta ancestral asiática conocida desde hace miles de años. Su raíz, llamada Panax ginseng tiene propiedades nutracéuticas y terapéuticas. No debe confundirse con el ginseng rojo, que se obtiene mediante tratamiento químico, ni con el ginseng brasileño (Pfaffia paniculata), que tiene propiedades diferentes. El ginseng blanco es una planta perenne de la familia de las araliáceas. Conocida como la «raíz de la vida» por la riqueza de sus propiedades, se considera un poderoso remedio capaz de tratar todas las dolencias, de ahí su nombre, «Panax», que significa «cura-todo». Por ello, las raíces de ginseng se utilizan en la industria nutracéutica, donde se incluyen en la composición de suplementos dietéticos. El ginseng tiene numerosos beneficios, entre ellos una mayor resistencia a la fatiga y el estrés y un efecto revitalizante. También mejora las capacidades intelectuales y físicas, y los deportistas lo utilizan sobre todo para aumentar su rendimiento y acelerar la recuperación muscular. En cosmética, es conocido por su efecto antiedad en la piel. En champús y productos para el cuidado del cabello, el ginseng blanco se utiliza más por sus propiedades tonificantes y revitalizantes. Su acción estimulante sobre el cuero cabelludo previene la caída del cabello y favorece su crecimiento. También se aprecia por sus propiedades desintoxicantes, una bendición para los cueros cabelludos grasos y propensos a la caspa. Por último, el ginseng blanco tiene el poder de devolver al cabello quebradizo, apagado y sin vida todo su esplendor.

Champú con ginseng blanco: un concentrado fortificante y tonificante 

Por sus propiedades revitalizantes y estimulantes, el ginseng actúa sobre la calidad del cabello. Con su alta concentración de vitaminas, ácidos grasos y minerales, purifica el cuero cabelludo en profundidad y lo protege del estrés. El ginseng también ayuda a regular las glándulas sebáceas y a limitar la producción de sebo. Hidratadas y oxigenadas, las raíces se regeneran y son menos grasas. El cabello crece más fuerte y sano. El ginseng blanco también ejerce una acción fortificante sobre los largos. Fortalece de forma duradera la fibra capilar y devuelve la vitalidad al cabello apagado, dañado y sin vida. Su acción revitalizante y reparadora reaviva el cabello y le devuelve su volumen, elasticidad y textura. El cabello apagado y quebradizo está más brillante y fuerte.

Impulsa el crecimiento de tu cabello y frena la caída con el ginseng 

Otra característica del ginseng blanco es su potente efecto anticaída y activador del crecimiento. Nuestros científicos han extraído de las raíces de esta planta milagrosa moléculas ultratonificantes con propiedades anticaída del cabello. Conocidos como ginsenósidos, forman parte de la familia de las saponinas y solo se encuentran en el ginseng. Estas moléculas activas son conocidas por sus potentes propiedades estimulantes y energizantes. Hay dos tipos de saponinas: saponina Rb y saponina Rg, que tienen propiedades diferentes pero complementarias. La saponina Rb actúa en primer lugar sobre la papila dérmica capilar para aumentar la proliferación de las células madre que la componen. Estas células son responsables de la renovación y el crecimiento del cabello. A continuación, la saponina Rg activa la vascularización del folículo capilar y estimula la circulación sanguínea en el cuero cabelludo. Esta acción fortalece el cabello de forma duradera y frena la caída. 

Triphasic: Champú al ginseng contra la caída del cabello

El champú Triphasic con ginseng blanco es un potente producto anticaída que limpia suavemente el cuero cabelludo a la vez que fortalece el cabello existente. Combina ginseng blanco, pfaffia orgánica, ATP y microperlas de aceites esenciales para estimular la microcirculación en el cuero cabelludo y frenar la caída del cabello. El ginseng blanco actúa como agente activador del crecimiento estimulando las células de la papila dérmica capilar para favorecer el crecimiento del cabello. El cabello se cae menos y crece más, fuerte y sano. Su fórmula natural, sin siliconas ni sulfatos, facilita el desenredado del cabello. Si se utiliza con frecuencia, deja el cabello suave, brillante y más fácil de peinar. 
Gracias a esta formulación innovadora a base de ginseng, René Furterer aporta una solución eficaz y duradera a la caída del cabello. Combinar el champú Triphasic con los tratamientos de la misma gama en una rutina de cuidados capilares específicos multiplica sus beneficios para un cabello brillante, sano, más fuerte, denso y revitalizado.