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¡El cabello blanco es maravilloso y tiene un carácter único! Detrás de su falta de color se esconde un alto grado de sensibilidad y fragilidad que no debe ignorarse. Por lo tanto, merece un tratamiento específico para las canas, o para el cabello gris.
Arrojemos algo de luz sobre los cabellos que son más vulnerables que otros.
Es importante ser consciente de la fragilidad del cabello blanco.
Como resultado del envejecimiento capilar, así como de la ausencia de melanina protectora, el cabello blanco es más vulnerable que el resto de los cabellos. Suele ser más fino y poroso, pero también más áspero y quebradizo.
Se altera la producción de componentes esenciales del cabello, como la queratina y el sebo. Al estar menos protegido, el cabello se deshidrata. Entonces se vuelve seco y poroso.
Los cabellos blancos se renuevan más lentamente que los demás. El cabello es de peor calidad y el diámetro disminuye. El cabello se vuelve más fino.
Con el paso del tiempo, el cabello está menos nutrido, con menos flujo sanguíneo. Se vuelve anémico.
Es un temor común para las personas de cabello blanco, así como para las que tienen el cabello muy rubio. A veces puede ocurrir que el cabello adquiera tonos extraños o se vuelva amarillo.
El color del cabello está determinado por la melanina. De hecho, se compone de 2 pigmentos que generan colores diferentes. La feomelanina es el origen de los colores que van del amarillo al rojo. Por su parte, el espectro de la eumelanina va del marrón al negro.
Los asiáticos tienen el cabello muy negro, porque está compuesto casi exclusivamente de eumelanina. En cambio, el cabello rojo contiene más feomelanina.
Sabemos que el envejecimiento provoca una disminución de la producción de melanina. Y es la feomelanina la que suele predominar en los cabellos castaños. Por ello, el color presenta tonos de amarillo sobre el cabello blanco.
Cuidado con el verano
Como la melanina ya no está ahí para desempeñar su función protectora, los cabellos blancos quedan expuestos a las agresiones del sol, el agua de mar o el cloro.
Por lo tanto, es necesario tomar medidas para proteger el cabello.
Precaución al peinar
Los cabellos blancos se dañan con el calor excesivo de los secadores, los rizadores o las planchas.
Atentos con la contaminación
Se va asentando poco a poco en el cabello y acaba cambiando la tonalidad ligeramente.
